miércoles, 9 de agosto de 2023

Cual es el mejor cristianismo.

Andaban los años 2000. Me habia casado y habia perdido la dinamica intensiva de retiros, visitas y actividades a grupos de la Renovación. A su vez me había apartado de la práctica quedandome solo la misa dominical y esto apenas. Y despues de un tiempo de cierta frialdad, tal vez deslumbrado por las novedades de la vida matrimonial que comenzaba a mis 40 años, con el nacimiento de mis hijas y todo lo que conlleva, después volvió a reaparecer mi necesidad espiritual. Ahora me preguntaba a todas horas cual era el centro, el núcleo del cristianismo. Así empecé a aclararme de cual habia sido mi verdadera motivación al estar aparentemente tan vinculado a la Iglesia. Encontré todo tipo de móviles desechables, amistades, prestigios alimentados por ser un personaje público en los grupos, necesidad del aplauso en las canciones y las oraciones, etc. Pero el centro de mi cristianismo no era lo que intentaba descubrir. Poco a poco empecé a descubrir que era Cristo. Que era la vida, el acontecimiento de encuentro y vida con Cristo, y concretamente era la cristificación. La misteriosa transformación en otro cristo que me hacía ser autenticamente yo mismo porque me liberaba de lo que no era yo, de lo que me mataba y me mentía, del demonio que hace vivir fuera de mi, y me hacía ser por el Espìritu Santo un hombre que hacia las obras del Hijo de Dios, un hijo de Dios unido al Hijo Unico. Y esa transformación progresiva era el fin de la vida de la Iglesia. Una transformación donde el yo individual, querido por el Padre, devenía en un Yo amplio que oraba al Padre como uno solo, el Hijo que se vuelve al Padre, Jesús mismo que ora el Padre nuestro y todos oramos en comunidad. El Cuerpo de Cristo, la verdadera y unica Iglesia orando y recibiendo el Reino de Dios para todas las criaturas. Después concreticé esta renovación cristiana en la oración del Padre nuestro. Descubrí matices como que se desplegaba en cada parte en una Encarnación que descendía desde lo más inconcebible y sublime, los Cielos, desde donde se nos mostraba su Nombre Santo para santificarlo con nuestra vida. El Reino, el reinar de Dios. Un vez, me llamó la atención que el Evangelio es una Palabra de poder para aquel que acoge el don de Dios.La acción del Espiritu Santo cambiando ese hombre para la muerte, en un hombre hacia la vida y la verdad, Cristo actuando en la vida del elegido y que ha aceptado ese amor de Dios. Cristo es el centro, vivido en la acción del Espiritu Santo que testimonio de él, te une a él y te transforma en él, y te hace vivir la misma intimidad de Jesús clamando en ti Abba. Con el tiempo preferí ampliar, a costa de no centrarme sólo en el Padre nuestro, los demás tipos de oración, como la alabanza, las lenguas, la Leccio, la espiritualidad carmelitana, la misa y el Rosario. Y todas para unificarse en una dinamización según el poder de la acción del Dios en mi vida. La Renovación quedó atrás, y con el tiempo ha derivado a una version americana donde el sacerdote hace de hombre orquesta, y no me entusiasma precisamente porque lo bueno de los grupos de oración es que nadie era, o debiera ser el protagonista, sino el mismo Señor Jesús. Y cual será el mejor cristianismo. Evidentemente el que obedece al Señor que te habla y te lleva a la santidad. El que purifica su oración, su apostolado y su relación con los hermanos para que quede cada vez más intensidad de amor a Dios.

jueves, 9 de octubre de 2014

lo importante es el proceso de Cristificación que ocurre en un cristiano, importante porque es auténticamente cristiano. Asi lo qué tiene que ver tanto con unos dogmas unas concepciones cerradas porque éstas pueden estar sujetas a la perfección limitada de un tiempo y espacio de una mentalidad de una cultura algo que mañana se va a transformar. Importante es Cristo mismoy todo el proceso qué lleva un cristiano desde que inicia su encuentro con Jesús resucitado, según va saliendo de su corazón las imperfeccionesy todaslas circunstancias en las que lo más profundo de su ser esta atado esclavizado al maligno en un proceso deliberaciónque va generando el hombre nuevoque participa de ser hijo de Dios y tener vida en sí mismo en el que tiene vida en sí mismo Dioss.s acción del Espíritu Santo es universal eterna sirve para cualquier hombre de cualquier civilización cualquier estadio de conciencia cualquier mentalidad científica cualquier nivel de evolucióneste evangelio lo podemos anunciar porn la Convención de que el que lo escuche no necesitaráponerse en una mentalidad judía y desde ahí poder practicar la vivencia del Resucitado porque las concepciones limitadas a un tiempo y espacio a los tiempos bíblicos creación encarnación parusía ya los espaciosde la tierra el cielo y la nueva creación con esa presentación de una eternidad y un tiempo limitado y nuestra participación en esta vida terrenal en contraposición a una eternidad qué nos espera en Cristo pero que se desvirtúa toda posibilidadde que sea de cualquier otra manera de que cualquier otra civilización dimensión universo mentalidad participen esa realidadestamos en una expresión espiritual concret izada en ese mundo judío cristiano Igriegapero podemos dar un salto para liberarnos de toda atadura mental y participar intensamente en el proceso que el Espíritu Santo lleva en nuestro espíritugracias al Padre por conocer nuestra vida y amarnos personalmenteIES y Dios resulta mucho más Dios que cuando estaba limitado a una concepción domesticada el tiempo el espacio y la mentalidad

martes, 10 de mayo de 2011

Danos hoy el Pan de mañana

Juan 6,30-35.Y volvieron a preguntarle: "¿Qué signos haces para que veamos y creamos en ti? ¿Qué obra realizas? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como dice la Escritura: Les dio de comer el pan bajado del cielo". Jesús respondió: "Les aseguro que no es Moisés el que les dio el pan del cielo; mi Padre les da el verdadero pan del cielo; porque el pan de Dios es el que desciende del cielo y da Vida al mundo". Ellos le dijeron: "Señor, danos siempre de ese pan". Jesús les respondió: "Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed.

Jesús es el Pan de Dios que desciendo del Cielo.
Si quisieramos limitar y reservar la Verdad a Jesús diriamos con base a este evangelio que sólo Jesús es el Pan de vida que Dios baja del Cielo. Que sólo él es la vida, el camino, la luz y la puerta. Sólo está Cristo. Y sólo en su Iglesia esta el Unico salvador. Y básicamente esa afirmación tiene su base en una Cosmovision y Cronovisión limitada y casi mitológica. Y sin embargo la verdad es que en Cristo esta la puerta, que no hay otra. ¿Como podremos conjugar una apertura de mentalidad sin desmarcarnos de la Palabra de Dios, del Hijo unico, Pan de Vida.

Una visión serena, abierta a lo que empezamos a conocer de la realidad física y lo que preveemos, esto es, mucho más grande, inconcebible, habitado, etc en otros planetas, bigbanes, dimensiones que aumenta en cantidad y calidad hasta el punto de dejar los apaños de darle algun sentido de realidad, puentes entre la ciencia y la descripcion de la realidad por la vision bíblica y de fe, completamente divorciados e incompatibles. Todavia podiamos hacer apaños de hacer coincidir la creación de la nada con el Bigbang, o la Parusía con la disolución en la expansión del Universo, pero las magnitudes de tiempo y espacio hacen que nos evadamos de la magnimidad del un universo con trillones de planetas como la tierra, muchos de ellos habitados por humanos en nuestro nivel de conciencia, y tambien superior. Y que decir de otras dimensiones, otros universos con sus binbanes, y tantas cosas que empezamos a atisbar. ¿Que queda de esta unica Tierra creada para que el hombre sea el rey de la creacion, que en la culminación de los tiempos nace Jesús y que en un tiempo termina con la Venida y el fin de esta tierra y cielos? Pues tal vez lo que queda es lo mismo que lo que nos aporta Jesús, nuestro Pan de vida. Lo unico que vale la pena tener, el unico tesoro que vale la pena desear en el corazón. Porque Dios se vale de Jesús, de su vida, de su resurrección, de su Señorio, de su Iglesia en la que se nos ha invitado a estar en su Cuerpo participando de su ser Hijo Unico, para darnos ese paso al nivel siguiente, al cielo, a donde nos destina aprendiendo de este tiempo de santificación, de transformación en el Espiritu Santo.

Ese hecho, con diferencias culturales, mentales, y de todo tipo es lo que viven cada uno de los hombres en sus culturas, terraqueas o extraterrestres. Y eso Cristo es lo mismo aunque nuestra limitación racional hoy nos limita nuestra comprension. Pero no es la comprension sino el recibir y nutrirse del Pan del cielo lo que supone el fin de nuestra existencia para pasar al cielo, uno de tantísimos, que en este momento nos corresponde y es la voluntad de Dios para nosotros.

viernes, 25 de marzo de 2011

La experiencia mística de Jesús

Si queremos saber cual es la experiencia mistica de Jesús, la que quiere trasmitir a sus discípulos, a nosotros, podemos entrar en comunión con el Maestro en la oración que el hace al Padre, que a los discípulos despues de verle en vigilia orando por las noches a solas le llegan a pedir que les enseñe a orar con el lo hace. Y les da claves de oración, la fe de que te lo va a dar, la insistencia como la vuida a juez injusto o el amigo que pide comida de noche, la discrección para que lo vea solo el Padre, abandonandose de lo que no es importante, que el Padre ya sabe que necesitamos y nos lo va a dar, comida y vestido, para buscar con insistencia el Reino de Dios, que Dios reine en ti.
Esa es la clave, que se haga la voluntad de Dios, como se hace en los habitantes de la esfera de conciencia a la que Dios nos ha invitado en Jesucristo, en el cielo. Permitir que Dios reine, que nuestro alimento sea hacer la voluntad de Padre. Esa es la verdadera experiencia de amor a Dios y al hermano, desear la voluntad de Dios, la palabra en las entrañasm como dice el salmo. Es entonces cuando al vivir de la Palabra nos volvemos Palabra de Dios para los demás. Igual que Jesús. Hacemos obras iguales a Jesus, y como el dice, hasta mayores. Nos cristificamos. Venimos a ser hijos de Dios en la comunion con Jesús del que hemos venido a ser parte de su Cuerpo, siendo unos parte de otros. Un hombre nuevo que ya no muere. Vivimos de la Palabra hasta ser Palabra para los demas hombres. Amamos a Dios y al hermano, y en ese amor somos transformados. Removiendo nuestros pecados, venciendo la tentación y liberandonos del hombre viejo segun el demonio, como dice el Padre nuestro.
Todo ese recorrido es pedir el Espiritu Santo que se une a nuestro espiritu para hacernos santos, participando de la misma vida de Jesús, siendo como es el, que dice la carta de san Juan. Y ese es el recorrido, la petición que subsiste en el Padre nuestro que Jesús enseña a sus discípulos cuando le piden que les enseñe a orar. El Espíritu que hace que santifiquemos el nombre del Padre. Que reine en cada uno. Que se haga su voluntad, que nos alimentemos del Pan de vida. Que perdona nuestra deuda, nos fortalece en la tentación y nos libra del Malo. Va descendiendo hasta lo mas intimo para santificarnos y recrearnos segun Jesús, haciendonos crecer hasta la estatura de Jesús en el amor.
Porque si un hijo te pide pan, aunque seas malo, no le vas a dar una piedra, como el Padre bueno no os va a dar el Espiritu Santo si se lo pedís. Ese es el centro de la vida mistica de Jesús y de nosotros sus discípulos. Un Espiritu que te hace hijo de Dios.

Lo que vive Jesús tal vez sea como dice Hans Kung la vivencia del fariseo que ha optado por el cumplimiento total y definitivo de la Ley. Sólo que Jesús ha centrado el cumplimiento más que en los detalles que hacían de estos judíos unos meticulosos y escrupulosos maniáticos de ritos y prácticas, la total entrega en amor a Dios y al hermano, en lo que queda cumplido y completada la Ley. Un hombre que a la edad madura lo buscan sus familiares porque le ha dado por hacer el Mesías, diciendo y haciendo milagros. Y claro, lo crucifican por armar escándalos.

Y Dios lo resucita. Cuando queremos cargarnos el cristianismo, sea Mahoma o la Nueva era, quitamos la resurrección y Jesús se queda en nada, o menos que nada. Un montón de plagios de religiones antiguas y un Mesías que se ha ido de viaje al Tibet.

Y lo que pasa es que la resurrección es el signo, que hace referencia a una resurrección aún mas majestuosa, la nuestra en Cristo. Porque Dios certifica con esta resurrección del hombre que le ama de esta manera que eso es lo que quiere de nosotros, convirtiendose la vida de Jesús en una Palabra de parte de Dios para los hombres. Palabra que expresa lo que es Dios, amor, y lo que quiere que lleguemos a ser. De ahi que en Jesús haya una naturaleza de hombre autentico y que en el resida la Expresión de Dios, la Palabra de Dios, el Hijo de Dios.

En este punto podíamos exponer una Reforma. No como la de Lutero que con elevar a infalible la Biblia se desmarcó de la infabilidad de la Iglesia, que por cierto era la que habia establecido la misma Biblia, y así quedar libre e independiente de la autoridad de Roma. Nosotros despues de algunos intentos como el de Galileo, desahuciado por querer sacar a la tierra del centro de la existencia o sea, de quedar descuadrados porque ni la Creación, ni el Parusía y a penas la Encarnación podemos enmarcarla en el ámbito de realidad sin tener que forzar la ciencia hacia una visión que coincida con lo que nos impone las creencias premodernas. Y nos queda lo mejor. Un Espiritu que da vida. Jesucristo que ha sido establecido como Señor y que hace de parte de Dios que reciba el que se acerque con fe a el un poder de salvación, entra en el ambito de salvación donde los cristificados participan de la vida de Jesús, superando esta etapa por la gratuidad amorosa que el Padre de Jesús nos ha brindado por su amor. Es Espiritu Santo nos guia a la verdad completa, que es lo que Dios quiere en este momento de evolución, nuestro paso al Cielo. Que como en la tierra no se acababa la realidad, sino que hay al menos algunos trillones de planetas, y nos sabemos que más en otras dimensiones, universos con sus bigbangs etc, este cielo ha de ser la meta a la que estamos llamados por Dios en este momento. Al abajarnos de nuestra falsa situación de reyes de la creación, donde todo empezaba y acababa con el humano terrestre, establecemos otro tipo de infinito, un Dios mas Dios, que estando infinitamente mas elevado, se abaja incluso más para amarnos y saber lo que hay en nuestro corazón.

Porque hemos dejado seguridades dogmáticas, pero no hemos quedado con lo importante, que Dios te ama, que en Jesús te ha dado lo que necesitas y que el Espiritu te va a hacer, si le dices amen, una obra en la que tu vida se plenificará y dará gloria a Dios.

lunes, 21 de marzo de 2011

Orar el Padre nuestro es vivir el cristianismo

No sabemos mucho, quizás en otro tiempo pensabamos que algo sabíamos y ahora sabemos que sabemos demasiado poco. Igual en ciencia que en el compendio que entendemos como Revelación. Datos que se generalizan para extraer un mensaje cada vez más extensivo pero menos concreto. No hay datos sobre la Creación, ni siquiera si existe tal momento de esa explicación mitológica. Podemos forzar la realidad para hacerla coincidir con el mito, pero en ese esfuerzo hacemos falso lo que tiene de verdadera y válida la Revelación, Jesucristo. Cuando un sacerdote astrónomo hizo valer la teoría de Big Bang la Iglesia creyó que esa era la traducción ciéntifica del relato de la Creación, y en sí solo es una acontecimiento que encierra la realidad hasta donde sabemos, dejando todo lo demás sin conocer, pero no sin existir. Anteriormente la Tierra encerraba toda la realidad, y ahora apenas es un planeta entre trillones. No hay nada que nos haga descartar que nuestro Big Bang no es un acontecimiento entre otros tantos trillones por decir algo que nos supera.
Asi que el depósito de la fe se vacía de sus verdades inamovibles. Creación, Encarnación y Parusía dejan de ser los tiempos cósmicos para volverse acontecimientos localizados en una cultura limitada por sus concepciones. La antigua de los hebreos y la moderna nuestra.
Y a cambio ¿que nos queda?. Siempre Jesucristo. En el hay una dinámica que absolutiza toda otra concepción, todo ambito de realidad, dimensiones, mentalidades, expresiones de la realidad. Hay una superación de conciencia que nos invita a sumirnos en una espiral de amor que nos hace saltar dimensiones, abrirnos al infinito en su manera de amar. La cruz victoriosa, no la cruz cultural y domesticada, entendida y expresada, sino la que esta viviendo el amor al Padre y al hermano, estableciendo un ambito de salvación que transforma en otro Cristo al que se acerca con fe, recibiendo la resurreción del Resucitado.
Y esa dinamica, esa fuerza de salvación que es el Evangelio es la que vive en el interior de la oración que Jesús nos regaló, el Padre nuestro. En ella nos incorporamos a Cristo, que es la santidad del Nombre, el Reinar de Dios, la voluntad de Dios para cada criatura, el Pan de vida, el perdón, la fortaleza en la tentación y la libertad del Maligno.
Es en resumen el Espiritu Santo que nos santifica y nos une el Hijo de Dios para vivir la vida de hijos del Padre santo, que hacen sus obras para gloria del Padre.

jueves, 17 de marzo de 2011

Orar continuamente

La oración es una necesidad del cristiano. Vive orando. En la oración y la Palabra encuentra su alimento, que en su momento, ya en vida o en la vida del cielo es el alimento de nuestra persona. Por eso orar continuamente es la unica opción.
En la vida del cristiano hay un momento al dia, o dos, o cinco o siete, en que se ora específicamente, se aparta de todo lo demás, como Jesús se apartaba en las noches de oración, y se dedica intensamente a esta oración. Y durante la jornada de trabajo continuamente seguir orando incoporando trabajo y oración.

Personalmente estoy optando por siete momentos de oración durante el dia, en los que durante unos minutos, 5 minutos por ejemplo nos retiramos a orar cada parte del Padre nuestro, con lo cual hay un hilo de oración intensa además de cada momento para orar.

Asi tengo el dia dividido en siete periodos de dos horas cada uno. Desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche. A las 8 Santificado, 10 Venga, 12 Hagase, 14 Pan, 16 Perdona, 18 Tentación, 20 Líbranos. Cada uno de los periódos los divido en seis de 20 minuntos, para orar en cada periodo con una parte del Padre nuestro referido al que estamos orando en esas dos horas. Asi a las 8 oro venga tu Reino para que tu nombre sea santificado, a las 8;20 que se haga tu voluntad para que tu nombre sea santificado, etc.

Por la mañana orar una hora y por la noche otra. Asi es un vida de oración con el Padre nuestro. Es un ejemplo y cada hermano encontrara su manera de orar continuamente.

lunes, 14 de febrero de 2011

Fe en Dios

Tal vez un tema central como la resurrección de nuestro Señor siempre fue difícil de creer. Cuando Pablo en el Aerópago proclama su resurrección le contestan con la misma ironía que usarían hoy los escépticos, de eso mejor nos hablas otro día. Y Jesús resucitó. Precisamente he visto cuando he intentado compartir con interesados en la Nueva Era sobre la figura de Jesús que lo que rechazan como algo "inventado" por la iglesia es la resurrección de Jesús. Dan como hecho que Jesús se fue despues de estar en Israel a la India, que allí murió despues de convivir con lamas. Y lo mismo pasa con los musulmanes. Y es que la resurrección de nuestro Señor es un signo de poder de Dios que retumba en nuestras conciencias, y que la manera de alejar ese impacto de la acción de Dios, que es un signo de poder, es dejando fuera de circulación este acontecimiento. Cuando a Jesús se le pide un signo, una acción que tuviera un sentido mas profundo anuncio que ante la falta de fe de los que se lo pedían daría el signo de Jonás. Un signo de poder, un milagro, la resurrección de Lázaro, que le costó la muerte para acallar su testimonio, cualquier sanación y liberación que hizo Jesús, hacía referencia a una resurrección mas importante, una sanación y liberación todavia mas definitiva. Igual que el paralítico no puede andar y despues de que Jesús le cura, ya si puede, el pecador, porque nuestra verdadera parálisis, ceguera y muerte es nuestro pecado que nos imposibilita para amar a Dios y al hermano, para tener la vida de hijo de Dios, vuelve a ser un hombre nuevo recreado por Dios en Jesús, a imagen de Jesús, haciendo las obras de Jesús, por pura gracia. Así que la resurrección de nuestro Señor es un signo que prefigura un milagro aun mayor, nuestra propia resurrección, nuestro morir al pecado, la muerte de hombre viejo segun Adan, para vivir como un hombre nuevo, segun Jesús el nuevo Adan, en un vida donde la muerte, que significa la angustia, el sufrimiento, el fruto del pecado que nos hace ser infelices porque no aleja de Dios, esta vencida y vivimos ya en la Vida eterna unidos a Jesús por el Espiritu que nos ha dado.Y es que la vivencia del cristiano, lejos de ser simple, superficial, fanática, simplista, propia de crédulos tontorrones que se traicionan como seres racionales, que fuerzan su pensar lógicamente, humanamente para creer lo que es imposible de creer, como en la mejor de las sectas fanáticas, son personas que saben de quien se han fiado. En Jesús, fuerza de Dios, que les ha venido a buscar. Un cristiano cultural, igual da que sea luterano que católico, es un insulto a lo que debería ser un discípulo de Jesús que hace obras iguales y hasta mayores que el mismo Jesús. Que resucita muertos en su nombre. Que proclama y extiende el Reino de Dios y hace retroceder al Mundo y su Principe. Los cristianos, y personalmente Dios me ha mimado bastante, tenemos una experiencia de encuentro con uno que estaba muerto y vive. Nos facilita nuestra fe para que no sea todo esto un cuento de niños como los reyes magos, papa noel, el ratoncito perez que lleva una moneda a los niños de 6 años que se le caen los dientes en España. Sin embargo, ante tanto amor de Dios ha tenido, podríamos los cristianos caer presa de una especia de anulación de nuestro ser juiciosos, racionales, sinceros, y por esa seguridad que nos da la experiencia cristiana, negar y no querer ver lo que es evidente. Y eso por no dañar nuestro cuerpo lógico. Porque no queremos dejar de creer no nos gusta que nos modifiquen ningun elemento que resulta necesario para nuestra fe. En el fondo nos pasa como la Inquisición que en Roma madaba a un hombre, Galileo, a la muerte porque les descabalaba una concepción del Universo en donde la Tierra no era el centro. Y pensaban que como puede ser que el lugar donde ha iniciado Dios la creación, donde ha enviado a su Hijo Unico, donde he suscitado la plenitud de los tiempos, el Alfa y el Omega, ¿como va a ser una roca dando vueltas al Sol? Había una insulto a la concepción cristiana, antes coherente y ahora tirada por los suelos. En ese tiempo mandaban a la muerte a los herejes y curiosamente lo hacian católicos y reformados. El hecho no es valorar la barbaridad de hace 500 años, sino ver que en el fondo no era tan lejana esa resistencia a cambiar nuestra mentalidad para salvar y proteger nuestra fe. Hoy no hay un sol como centro, sino cantidad que nos marean de soles, galaxias y todo lo que nos echen, incluyendo bigbanes (siempre queremos estabilizar nuestras concepcion para hacerla equivalente a la bíblica, decimos que Dios creó en Unvierso desde el Bigbang para hacerlo equivaler a la creación de Dios en los siete dias, antes de los que no habia nada, pero nada nos prueba que este bigbang es uno entre trillones y tal vez de trillones de dimensiones) y tantas realidades que agrandan hasta el infinito a nuestro Dios omnipotente e incomprensible. Es como si antes Dios estuviera mas controlada, allí en el cielo con Jesus en su derecha fuera mas fácil de asimilar y ahora nos han galileizado, entiendase, nos han descabalado y resulta si quieres un Dios mas grande, mas glorioso, mas fuera de todo comprensión.Una infinitud que a veces pasa inadvertida es que Dios es tan grande que es detallista. Que sabe de mi mas de lo que yo mismo sé. Que tiene mis pelos contados. Esta claro que yo nunca los he contado. Pues que sabe mas de mis pecados, mis anhelos, mis miedos, mis heridas, mi inseguridades, mis alegrias, lo sabe todo, me tiene en cuenta, conoce mucho mas que mi nombre. Y eso de mi igual que de cada hombre, de este planeta o de trillones de otros igual a este. El Dios y Padre de Jesucristo controla hasta una brizna de hierba que se mueve. Y esa infinitud en su amor, en sus detalles amorosos, en su saber lo que estoy viviendo, es lo que me hace darle gloria más sabiendome tan pequeño, que cuando casi lo tenia controlado. Por eso no hay que tener miedo a abrirse a nuevas concepciones cientificas, porque al final somos menos que microbios, por muy reyes de la creación que digamos ser, aunque en la tierra no conocemos otros reyes, la tierra sera un encenario del amor de Dios entre tantos otros que no vale la pena imaginarlo, solo darle gracias y glorificar al que ama a cada uno sabiendo lo que hay en su corazón, teniendo una voluntad de plenitud y felicidad para cada uno, mucho mas alla de lo que podriamos concebir y expresar.Un detalle es como cai en este tipo de pensamientos. Yo oraba, y sigo orando, con el Padrenuestro. Y me gustaba hacer intecesión por toda la humanidad, para que el Padre en el nombre de Jesús les diera el Espiritu Santo, asi en cada peticion, Venga tu Reino, etc intercedía por toda su creación que entendía que era los habitantes de la Tierra. Un día empece a pensar que los otros planetas si estan habitados Dios les daria tambien lo mejor que tiene, ¿como les va a dar menos? Dios haria un historia de salvación como la ha hecho con nosotros en Israel. Y suscitaría un Mesías para dar la plenitud de su amor. Y les enviaría en Espiritu Santo para hacerles hijos de Dios en el Hijo Unico. Pues por si acaso seguí pidiendo el Espiritu Santo para toda su creación sea cual fuera lo grande, yo no lo sabía pero Dios si. empecé a orar por toda su creación. Finalmente de un paso y empecé a dar por supuesto que los relatos de la Biblia estaban ambientados en la mentalidad de los hombre de hace 50 siglos, y no solo hace tanto, sino hace 500 años daban por supuesto que la tierra era lo unico donde podria haber vida y esta inteligente. Era como si por no desdecir de lo que expone la Biblia tuviera que forzar a la ciencia a decir lo que no dice. Claro que habia opciones dentro del abanico de la ciencia que vienen a dar una vision esceptica, materialista, casi nihilista y amparandome en esa vision cientifica hacer valer la vision bíblica, pero no dejaba de ser una opción que rayaba con la hipocresía. Yo quería hacer decir a la ciencia lo que me conviene para no tocar mis seguridades cristianas. Asi se entiende que hay vida inteligente (no de ovnis, sino en números dadas las dimensiones de universo, los trillones de planetas que se calculan, su composicion, etc) y solo algunos niegan y establecen la vida y esta humana como una excepcion en el universo. Así que mejor oramos por todos, porque Dios tiene en cuenta a todos mis hermanos, de la tierra y de fuera y de cualquier otra dimension y no se cuantas cosas mas.He leido algo que me hizo gracia. Si existiera vida inteligente extraterrestre la Biblia lo diría. Que gracia. Si no existiera nada de lo que dice la Biblia, andariamos si creer en atomos y hormonas por decir algo. Andaríamos con un mar en el cielo. Y la fe cristiana se refiere a la fuerza de salvación que Dios ha suscitado en Jesús, resucitandolo y con el a los que creen en El. Estableciéndolo como Señor y enviando por su muerte el Espiritu que nos hace hijos de Dios. Conozco iglesias que trabajan hasta lo indecible para dar una base cientifica al relato del Diluvio. Y al final la misma arqueología con la que quieren explicar que no hay contradicción entre lo que expone la Biblia y lo que dice la ciencia, despues de variados y complicados conceptos, resulta que esta arqueologia es de lo mas vulnerable, llena de contradicciones, casi dificil de tomarsela en serio. Limitada en sus medios y a veces mediatizada con conceptos de civilizaciones. Asi prefieren poner a Egipto por delante de India o China, no por algun tipo de demostraciones sino casi por decreto. No vale la pena meterse en esos berengenales por demostrar que el Diluvio o el ombligo de Adan son asi o de otra manera.Somos los hijos de Abraham. Los que creen como su padre, contra toda esperanza. No los que creen una idea del Universo o de la historia humana o astrofísica. Tampoco los que creen sobre lo que dice la Biblia sobre siete dias de la creacion, o sobre tal o cual detalle. Los que creen en la acción de Dios, que me ama, que quiere darme lo mejor que tiene. Los que creen que Dios me ha dado una promesa y que en su tiempo se va a cumplir porque Dios lo puede todo. Y no me ha regalado cualquier cosa,sino lo que mas anhela mi corazón, mi hijo y mi tierra, mi felicidad, mi plenitud. Expresado en su Palabra, Jesús, en la que Dios ha manifestado lo que quiere hacer de mi, un hombre que ama en la dimension de la cruz, dando su vida por su enemigo, amar a Dios y al prójimo. Dios me dará su Espiritu, me lo ha dado, y me hará en su tiempo ese hombre nuevo que hace las obras de Jesús, y hasta mayores para gloria de Dios Padre. El problema no es falta de fe. Por cierto, la fe la da el Espiritu Santo. Lo que pasa es que el objeto de la fe es Dios mismo y la pascua, el paso de Dios por mi vida, mi estar en Egipto y sacarme con brazo poderoso hasta la libertad a la Tiera prometida, a traves del desierto, de la cruz. Eso sí que es una fe contra toda esperanza. ¿Como va a hacer de mi, que soy bastante desastre, un hombre que haga las obras de Jesús? Pues eso creo que es la fe de Jesús, del hombre que en la cruz seguia esperando las grandes obras, con dice en el salmo Eli Eli, que no es ningun reproche de que le haya abandonado el Padre, sino lo contrario, como expresa el final del salmo.No sé si las iglesias prefieren visones mas simples, no darle tantas vueltas y dejarlo todo como si aqui no hubiera pasado nada, digo cientificamente hablando. Pero tambien cabe pensar que enconder la cabeza como avestruz a la larga nos va a dar mas problemas que afrontar lo válido del contenido de la Santa Biblia. Porque final, las escrituras hablan solo de Jesús, no de la creación, del diluvio, de la existencia de vida en el Universo, o de cualquier otra cuestion ciéntifica, y mas aun de las que nos sobrepasan nuestra capacidad de entender. Sino la confianza de un niño en su papaito, el Abba de Jesús. Y así darle gloria como Jesus lo hace cuando hace su voluntad, permitiendo que se cumpla su obra en el.